La fermentación maloláctica es la transformación del ácido málico del vino en ácido láctico gracias a la intervención de las bacterias lácticas. Se produce tras la fermentación alcohólica y produce efectos beneficiosos en el vino. ¿Cuáles son dichas aportaciones?
- Descenso de acidez y sensación de suavidad. Los vinos se vuelven carnosos y equilibrados.
- Cambio aromático. Los vinos se hacen más complejos y ricos en matices, aumentando así su calidad.
- Aportación de cuerpo, volumen y cremosidad en boca gracias a la acumulación de las llamadas nanoproteínas.
Sin embargo, ¡no hay mejor explicación que con una degustación!
